Yo era de esas que no apostaba un puro duro al amor, esas que gritaba al mundo que dejase de buscarlo que se había ido de putas con la cena hecha, la cama deshecha y creyendo tener el control de nuestro mundo. Pero ahora solo puedo decir que eso del amor y de querer a alguien es inmune, que el corazón y las mariposas en el estómago aceleran involuntariamente.
(Como contradecirme completamente desde el principio al final del texto)
Y.. que del amor sálvese quien pueda.